¿Qué hacer ante la creciente contaminación mundial de plástico?

23 marzo, 2023
  • Considerando que el plástico puede tardar más de 400 años en degradarse y que su producción ha superado los 8 mil millones de toneladas, una opción es avanzar en el reciclaje, apostando por alternativas de mayor biodegradación
  • Te invitamos a conocer diversas iniciativas UC que buscan aportar en este contexto.

Apenas un 9% del plástico que se elabora en el planeta es reciclado, de acuerdo con un artículo de National Geographic. No es mucho, si pensamos que la producción mundial de plástico –según la misma publicación– ha alcanzado los 8.300 millones de toneladas métricas, gran parte de la cual se transforma en basura, terminando principalmente en los océanos. Y se espera que, para 2050, la producción llegue a los 12 mil millones de toneladas.

Una situación preocupante, si se considera que el plástico necesita alrededor de 400 años para poder degradarse.

Entonces, ¿qué hacemos ante la creciente producción mundial de plástico?

LA UC Y LA REDUCCIÓN DE RESIDUOS PLÁSTICOS

Alcanzar la meta de carbono neutralidad al 2038 es uno de los grandes propósitos de la Pontificia Universidad Católica de Chile, por lo que la UC se unió a Algramo en la búsqueda por reducir residuos plásticos dentro de su comunidad. La iniciativa consta de la instalación de estaciones de recarga de bebidas en los campus Casa Central, San Joaquín y Oriente, para así reducir el consumo de plástico. Este es otro de los esfuerzos que impulsa la universidad para generar una cultura sustentable en su comunidad.

Este nuevo sistema de refill de bebidas de Algramo consiste en dispensadores de bebestibles con envases inteligentes reutilizables. De esta manera, estudiantes, académicos, académicas y funcionarios y funcionarias de la institución podrán disminuir el uso de plásticos de un solo uso en cada recarga.

“Reconocemos la realidad de que existe un número importante de generación de plásticos en nuestros campus producto de la compra de bebidas gaseosas y hoy estamos tomando acción para que esa compra no genere impacto. Al menos desde el punto de vista de la generación de residuos, que sabemos contribuye a la degradación de los ecosistemas acuáticos y terrestres”, afirmó el rector de la UC, Ignacio Sánchez.

Por su parte, José Manuel Moller, CEO de Algramo, aseguró que la instalación de estas máquinas en, por ahora, tres campus de la Pontificia Universidad Católica de Chile es “una muy buena noticia con unos gramitos de plástico menos cada vez que se dispense”

“Es necesario y una urgencia poder avanzar en modelos de reuso como este, en que estamos siendo más inteligentes en cómo estamos usando el envase y aprovechando una cualidad del plástico que dura mucho tiempo y que muchas veces vemos la cara negativa de esa cualidad”, explicó en la misma línea María Fernanda Valdivieso, directora de Pacto Chileno de los Plásticos.

Las personas deben contar con su envase inteligente que se puede conseguir pagando con la tarjeta MACH más 2 recargas por solo $800 (precio referencial $5.800). Luego, se debe descargar la app de Algramo, asociar el vaso y cargar la cuenta para dispensar Coca Cola, Fanta y Sprite sin azúcar, evitando contaminación plástica y pagando hasta un 30% menos.

La idea es llevar el envase a todas partes, pues se puede asociar el envase inteligente a la cuenta de cada persona para cargarle saldo y registrar el impacto positivo en el planeta con cada recarga. Ni reciclando a máxima capacidad podemos hacernos cargo de la cantidad de desechos que producimos. Por eso, el mensaje es tomar acción y cambiar nuestra forma de consumir.

SOLUCIONES EMERGENTES Y AMIGABLES

Bajo este panorama que enfrentamos, la investigación para encontrar vías para enfrentar esta situación, es clave. De ahí que investigadores nacionales e internacionales se reunieron en la conferencia “Life in Plastic is NOT Fantastic”, realizada recientemente en el Centro de Innovación UC. En el encuentro se abordó la acumulación de la contaminación plástica en ambientes terrestres y marinos, y las soluciones emergentes y amigables con el ambiente provenientes desde la biotecnología.

Como explicó César A. Ramírez-Sarmiento, profesor del Instituto de Ingeniería Biológica y Médica, “desde el punto de vista ambiental, vimos cómo la mayoría de los plásticos se acumulan en nuestros ambientes marinos en la forma de microplásticos, desechando la idea de las mal llamadas islas de basura que han sido parte del relato respecto de la contaminación plástica en nuestros océanos. También vimos cómo algunos de estos microplásticos ya han sido encontrados en nuestra costa, y que éstos son consumidos por distintos animales que son parte de nuestra cadena trófica”.

AVANZAR EN EL RECICLAJE

De acuerdo a la expositora Kara Lavender Law, académica en Sea Education Association, EE.UU., existen varias estrategias para avanzar en el reciclaje. Muchas de ellas dependen de políticas públicas y un compromiso de las industrias de apostar por alternativas de mayor biodegradación. Por ejemplo, innovar en el diseño de materiales y productos para utilizar polímeros más fáciles de biodegradar y evitar uso de materiales plásticos mixtos que muchas veces dificultan su reciclaje, reducir la generación de desechos plásticos y mejorar las capacidades de manejo y recolección de estos contaminantes, y también capturar estos contaminantes antes que lleguen a nuestros ambientes.

Como agregó el también investigador del Instituto Milenio de Biología Integrativa (iBio), en el caso de Chile, “es necesario crear industrias de reciclaje de PET – o tereftalato de polietileno, el compuesto de la mayoría de productos de consumo diario– botella a botella, que permitirán cumplir con las metas que nuestro país ha establecido a nivel legislativo, para promover la incorporación en estas botellas de un porcentaje de PET reciclado en nuestro país. Y a largo plazo, considerar el desarrollo de industrias basadas en el reciclaje biológico, amigables con el medio ambiente, que reduzcan el desecho de los contenedores de PET para el empaque de productos, que son generados por reciclaje mecánico y que, luego de uso, por lo general no son reciclados nuevamente”.

ENZIMAS QUE “COMEN” PLÁSTICOS

Otra alternativa para reducir la gran cantidad de plástico que tenemos en el planeta, es “comérselo”. Como explicó el profesor César A. Ramírez-Sarmiento, hay estudios que han determinado que microorganismos obtenidos a partir de muestras ambientales colectadas en distintos ambientes marinos, contienen enzimas que degradan plásticos. Particularmente poliésteres como el PET y otros co-polímeros similares al PET, además de otros poliésteres biodegrádales como el PBAT o el PCL. Algunos de estos microorganismos forman consorcios que permiten no solo degradar estos polímeros, sino también eliminar completamente sus productos de degradación a través de su metabolismo.

Junto al equipo de investigadores de Wolfgang Zimmermann, profesor de Leipzig University, Alemania -también expositor de la conferencia-, el profesor César A. Ramírez-Sarmiento participó en un estudio que describe enzimas que degradan PET a altas temperaturas, por sobre los 70 grados Celsius.

A lo que se suma la investigación, en la que también participa Beatriz Díez, profesora de la Facultad de Ciencias Biológicas, en la que se identificaron una variedad de enzimas en las costas antárticas que pueden degradar o «comer” plásticos a temperatura ambiente -a 25 grados Celsius- con gran eficiencia.

Como sostuvo el académico de la UC, estas enzimas “podrían permitir su uso como aditivos en la ropa de poliéster para reducir el moteo en estas vestimentas y con ello aumentar su tiempo de vida útil”. Y concluyó: “Algunas de estas enzimas pueden degradar el PET de manera eficiente tanto a temperaturas moderadas de 25ºC como también a altas temperaturas, en algunos casos pudiendo degradar completamente PET de baja cristalinidad sin requerir ningún tipo de tratamiento previo del material, abriendo así la puerta a su posible reciclaje circular mediante biotecnología”.

“LIFE IN PLASTIC IS NOT FANTASTIC»

El evento internacional contó con el auspicio de la Pontificia Universidad Católica de Chile, el Instituto de Ingeniería Biológica y Médica UC, el Instituto Milenio de Biología Integrativa (iBio) y la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID) a través del proyecto del Programa de Cooperación Internacional PCI ANID 2019/13259-9. Además del patrocinio del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación y del Ministerio del Medio Ambiente.

El encuentro contó con la participación de los destacados expositores internacionales Kara Lavender Law (Sea Education Association, EE.UU.); Wolfgang Zimmermann (Leipzig University, Alemania) y Basak Öztürk (Leibniz Institute-DSMZ, Alemania). Mientras que los representantes nacionales fueron Cristóbal Galbán-Malagón de la Universidad Mayor, y los profesores Beatriz Diez y César A. Ramírez-Sarmiento, de la UC.

Síguenos en Twitter