La profesora y directora del Centro de Derecho Ambiental de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile asumió el desafío de encabezar el Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia CR2 para el periodo 2024-2025. A partir de su destacada trayectoria en material ambientales, la académica comparte su visión sobre los retos del centro y la importancia de la ciencia en la toma de decisiones en el contexto del cambio climático. «La ciencia debe adelantarse a eventos climáticos extremos», afirma en esta entrevista.
Pilar Moraga, académica y especialista en derecho ambiental, ha asumido el desafío de dirigir el Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia CR2 para el periodo 2024-2025. Profesora Titular de la Universidad de Chile y actual directora del Centro de Derecho Ambiental de la Facultad de Derecho, Moraga busca aportar su vasta experiencia y profundo compromiso con la sostenibilidad en esta nueva responsabilidad. En su carrera ha desempeñado un papel fundamental en la formulación de políticas ambientales y en la promoción de la investigación interdisciplinaria.
En su trayectoria, ha destacado por su pionera labor en la promoción del desarrollo sustentable, lucha contra el cambio climático y fomento de las energías renovables. Su nombramiento como directora del CR2 llega en un momento crucial, ya que el centro se enfrenta a nuevos desafíos científicos y políticos. En este periodo, liderará la elaboración de un informe integrativo sobre carbono neutralidad que conecta directamente con la contingencia de la revisión de las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC) de Chile, marcando así un hito en la política pública nacional e internacional. “La carbono neutralidad es un camino complejo y equilibrado», dice.
En conversación con Prensa Uchile, Pilar Moraga comparte sus reflexiones sobre la importancia de la ciencia en la toma de decisiones frente al cambio climático. Además, aborda el papel esencial del marco legal en esta misión, destacando cómo las leyes pueden conducir procesos y marcar pautas para avanzar hacia un futuro más sostenible. Asimismo, la nueva directora del CR2 profundiza en la relevancia de la igualdad de género en el ámbito científico y su compromiso con el desarrollo de políticas y acciones que fomenten el liderazgo femenino.
– ¿Cuáles son los principales desafíos que debe abordar el Centro este año?
Bueno, dado que es un nuevo financiamiento, se estableció una propuesta para el 2024 y 2025 que involucra varios compromisos científicos. Entre los que puedo destacar hay un nuevo informe integrativo para las naciones sobre carbono neutralidad. Lo interesante de este informe es que tiene varias particularidades. Lo primero es que se conecta directamente con la contingencia de la política pública, porque en estos dos años de CR2 pasa también que van a ser los dos años que anteceden la revisión de la NDC de Chile, que se debe presentar a fines del 2025 en la COP, que va a tener lugar en Brasil y que es el aniversario de los diez años del Acuerdo de París.
En esta ocasión, todos los Estados partes de la Convención Marco de Naciones Unidas para el Cambio Climático deben presentar sus NDC revisadas hacia una mayor ambición y, por lo tanto, Chile también lo va a tener que hacer. Y esto va de la mano con los compromisos establecidos en la Ley Marco de Cambio Climático Chilena, que es muy reciente también y, por lo tanto, se da una contingencia acá en que vamos a estar trabajando en un informe, en un reporte a la Nación, sobre un tema que también va a ser muy central en la política pública nacional e internacional. Una particularidad es que es integrativo, así le llamamos a los temas interdisciplinarios del Centro en el que participan en su desarrollo distintas disciplinas. Hay diversos enfoques en este escrito que tiene como sustrato mucha investigación y evidencia científica, pero que se transforma en un documento de divulgación científica y que termina con recomendaciones para las políticas públicas.
La segunda particularidad de este informe es que se inserta dentro de una preocupación global. Siempre están muy centrados en problemas del país muy concretos, como incendios, contaminación, mega sequía, gobernanza climática, pero todo muy nacional. Y ahora las preguntas científicas que se han formulado, si bien tienen como principal foco lo local, no se pueden desagregar de los objetivos internacionales y regionales. Entonces, esto es como una apuesta nueva que hace el CR2 hacia una mirada más internacional y de comprensión y de conexión con las preocupaciones de cambio climático, pero a nivel global.
– ¿Cuál es, a su juicio, la importancia de la incidencia de la ciencia en la toma de decisiones?
Es súper fundamental. Si contamos con evidencia de eventos climáticos extremos futuros, podemos tomar medidas con antelación para contener los efectos en una mirada adaptativa de futuro, pero también con un enfoque muy fuerte en prevención. Por ejemplo, en el tema de los incendios forestales, hay un ejemplo claro de cómo la evidencia está logrando un cambio en la política pública y desde una óptica preventiva que me parece esencial en este contexto de cambio climático. Debemos adelantarnos a esas situaciones extremas que vamos a vivir y poder adoptar las medidas adecuadas.
– Una de las metas es la carbono neutralidad ¿Cómo podemos lograrla?
Una de las primeras tareas del CR2 va a ser trabajar sobre este concepto de la carbono neutralidad porque es confuso. Primero, lo asociamos mucho al carbón, como sacar el carbón y no es eso, acá estamos hablando de gases de efecto invernadero, y se habla de neutralidad porque no es que eliminamos absolutamente los gases de efecto invernadero, cuestión que parece imposible, sino que es llegar a un equilibrio entre las emisiones y la captura o el secuestro de emisiones. Ahora, es un concepto que, por lo tanto, queremos trabajar porque no es muy claro ni en la literatura, ni en el discurso, ni en la discusión pública. Queremos ir ahí porque además no es que haya un modelo de carbono neutralidad. Hay múltiples opciones de políticas que se deben ir adoptando en función de una visión de futuro. Entonces, eso queremos plantear, que esto no es tan simple como decir ‘ya cerramos todas las termoeléctricas a carbón o pasamos 100% a renovables’ porque todas las opciones tienen costos, porque este es un problema complejo.
– ¿Cómo qué tipo de medidas?
Una medida es la eliminación del subsidio a los combustibles fósiles. Eso es carbono neutralidad. Porque no podemos seguir fomentando el uso de combustibles fósiles y una manera de fomentarlos es a través de los subsidios ¿Pero qué pasa si eliminamos los combustibles fósiles? ¿Cuáles son las consecuencias sociales y ambientales? Ambientales pueden ser muy positivas, pero sociales pueden ser muy negativas. Por lo tanto, es una medida que no se puede adoptar sola. Hay que ver cómo se compensan o mitigan esos efectos, qué medidas adoptamos para que no suba de manera exorbitante el precio del transporte y con ello el de los alimentos de primera necesidad. Entonces, es un camino que hay que pensar, hay que definir, hay que modelar y en eso es lo que queremos trabajar.
O si vamos a hacer hidrógeno verde en la Patagonia, bueno, ¿cómo vamos a proteger la biodiversidad que involucra esta medida? O sea, todas las acciones y medidas conllevan impactos, sociales, ambientales, incluso económicos. Por lo tanto, ¿cómo definimos un camino que, en ese sentido, sea lo más equilibrado posible? Y cuando hablo de equilibrio, también hablo de equidad entre territorios y comunidades, sociedad y naturaleza, generaciones presentes y futuras. Cómo metemos entonces todo eso a la juguera y sacamos algo que más o menos sea conveniente para los desafíos que tenemos.
– ¿De qué manera ayudan las leyes en esta misión?
Yo estudié Derecho porque creo que las leyes sí logran conducir ciertos procesos. Si comenzamos con el marco legal que se ha impuesto desde los inicios, fue el marco legal internacional el que ha definido directrices para avanzar. O sea, a pesar de que estamos peor que antes y que uno podría decir ‘esto no sirve para nada’, creo que no es así. Pensemos el mundo de hoy de Chile sin el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental, que tiene muchos defectos y problemas, pero ¿podríamos vivir hoy día sin ese instrumento de gestión ambiental? Pareciera que no, sería un desastre.
Y eso se incorporó en nuestro cotidiano gracias a una reforma legal, que fue la del año 94, posterior a la Conferencia de Río de Janeiro 1992. Por lo tanto, todo este régimen viene de lo internacional, ha definido directrices en Chile y hoy día tenemos un marco jurídico gracias a la Ley Marco de Cambio Climático, que define claramente cuáles son las metas, cuál es la meta de Chile, cuáles son las metas sectoriales, cuáles son los instrumentos para poder alcanzarlas, cuáles son los plazos y los responsables. Entonces, pareciera ser que el marco legal actual sí tiene definido un camino y la manera de cómo debemos hacerlo. Ahora son los actores responsables definidos en este cuerpo legal los que tienen que ahora hacer aquello que se les mandata.
Mi respuesta es contundente: por supuesto que el marco legal nos va a facilitar la tarea -o nos la va a hacer más difícil- en la medida que esto esté mejor definido en la legislación con normas muy claras, quizás con sanciones en caso de no cumplimiento. Pero después está toda la labor y la responsabilidad que tienen los distintos actores de la sociedad, desde lo público y lo privado, y la sociedad civil, para cumplir con los mandatos que nos ha indicado el legislador.
Visiones sobre ciencia y género
– Este Centro ha sido dirigido por mujeres,principalmente ¿Cómo ve la presencia femenina en cargos de liderazgo?
Yo no creo que sea una tendencia, es una cuestión circunstancial, porque en el caso de este Centro hubo una apuesta de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas por poner a la cabeza de un proyecto como este a la profesora Laura Gallardo. Con ello se permitió abrir espacio a muchas otras académicas, porque Laura intencionó para lograr una relación de equilibrio en los liderazgos. La segunda directora fue la ministra Maisa Rojas, en su alternancia estuvo René Garreaud, y después yo, que además vengo de otra Facultad, cosa que habla de esta Universidad en términos muy generosos, muy positivos, y con altura de miras también de que se da espacio para que existan estos liderazgos. Ahora, ¿por qué digo que es ocasional? Porque esto parte con un origen que es Laura y que abre estos espacios, pero esto no asegura que en el futuro sea así.
Por lo tanto, vamos a trabajar en estos dos años por elaborar un protocolo de género al interior del CR2. Nosotros contamos con política de género a nivel de Universidad, pero nos dijimos que es necesario intencionar como organización el fomentar los liderazgos en equidad o en igualdad de condiciones entre hombres y mujeres. Eso no se hace solo, es necesario intencionarlo con políticas y con acciones concretas. En ese sentido, estamos preocupados de cómo fomentar que las jóvenes investigadoras puedan tener perspectivas dentro de la organización del CR2, pero también que les sirva para impulsar sus carreras dentro y fuera, para que se atrevan también a salir en la prensa, a ser entrevistadas, a mostrar el trabajo que hacen, que es tan valioso como el de nuestros colegas varones. Debo confesar que no es una tarea fácil. Ya hemos comenzado las discusiones y todavía existen distintas visiones sobre el tema, no hay consenso, no hay una visión común. Y prefiero decirlo sin vergüenza, porque creo que es importante saber dónde estamos y entender por qué estamos aquí, y que si damos un paso por una mayor equidad dentro del Centro, que sea porque estamos convencidos que eso es lo que tenemos que hacer, pero como organización, no como individualidades. Ojalá que surgiera un liderazgo masculino en esto también. La igualdad de género no es tema de mujeres, es un tema de la sociedad completa.
Lo que rescato es que aquí sí se pueden dar esas discusiones, con altura de miras. Entonces, ahí tenemos un objetivo de poder avanzar en esta discusión y poder definir y apoyar los liderazgos femeninos para que haya renovación, y, por lo tanto, que deje de ser algo ocasional y pase a ser una tendencia. Tenemos muchas líderes mujeres en la Universidad.