- Organismos de salud de Estados Unidos y Europa aprobaron recientemente su uso y se espera que en Chile sea analizada por el Instituto de Salud Pública para su eventual aprobación, según indicó la directora del Departamento de Salud Pública de la Universidad de Talca, Erika Retamal Contreras.
Cada invierno son miles las personas en el país cuya salud se ve en riesgo por el Virus Respiratorio Sincicial (VRS), enfermedad que en este último invierno estresó la capacidad del sistema hospitalario y que en algunos casos puede ser fatal, especialmente en infantes y adultos mayores.
Sin embargo, esta realidad podría cambiar en el corto plazo con el desarrollo de la primera vacuna para combatir esta patología, que ya fue aprobada para su uso en Estados Unidos y Europa.
“El VRS, las infecciones que año a año afectan tanto a niños, niñas y también adultos mayores, son de extrema gravedad y muchas veces causan la muerte, además de una gran sobrecarga hospitalaria” aseguró la epidemióloga y directora del departamento de Salud Pública de la Universidad de Talca, Erika Retamal Contreras, y agregó que “cualquier medida que prevenga o disminuya los riesgos de esta enfermedad es una gran noticia”.
La vacuna llamada ABRYSVO, fue desarrollada por el laboratorio farmacéutico Pfizer y está dirigida principalmente a personas mayores de 60 años y embarazadas, quienes traspasarían los anticuerpos a sus hijos en gestación y los protegería durante los primeros seis meses de vida, etapa en que los lactantes son especialmente vulnerables a la infección respiratoria generada por este patógeno.
En Chile, en tanto, para que estas inoculaciones sean utilizadas deben pasar primero por la aprobación del Instituto de Salud Pública (ISP) “y una vez que esté autorizada, se incorpora al plan nacional de inmunizaciones”, sostuvo la académica.
Además, recalcó que los virus estacionales mutan cada año, por lo que se esperaría que al igual que en el caso de la influenza, “debamos tener vacunas diferentes anualmente para poder proteger a la población en riesgo de enfermar”.
En esa misma línea, la académica destacó que la utilización de este tipo de prevención primaria no solo es una buena noticia para la población de riesgo frente al VRS, sino que para todos, por cuanto ayudaría a evitar la sobrecarga del sistema de salud durante el periodo invernal y permitiría atender otras patologías de manera más expedita.