En el marco del programa de trabajo colaborativo entre la Aduana Regional de Talcahuano y la Capitanía de Puerto, se llevó a cabo un importante operativo de control y fiscalización enfocada en detectar y prevenir actividades ilícitas en el Puerto de Coronel, en la Región del Biobío.
El operativo, que se extendió toda una jornada, fue coordinado por el Departamento de Fiscalización en colaboración con la Unidad de Drogas y Delitos Conexos de Aduanas y la Capitanía de Puerto, que participó con un equipo especializado de la Policía Marítima, asegurando un despliegue integral en todas las zonas terminal portuario.
El control se centró en la revisión exhaustiva de áreas críticas como los depósitos de contenedores vacíos, maestranzas, espacios de acopio de mercancías y zonas de «stacking» de contenedores destinados a la exportación.
En particular, se llevaron a cabo inspecciones aleatorias de contenedores refrigerados (Reefer) y estándar (Dry), tanto en el perímetro interior como exterior del puerto, seleccionando unidades de exportación con indicadores de riesgo para una revisión física detallada.
Este operativo forma parte de una mesa de trabajo público-privada que busca fortalecer los mecanismos de coordinación, inteligencia y gestión para prevenir actos delictivos, reducir el contrabando y evitar la contaminación de mercancías de exportación.
“Destacamos la importancia de este tipo de fiscalizaciones, que contribuyen al aseguramiento de la cadena logística y brindan la certeza de que las operaciones de exportación desde los puertos de la Región del Biobío se realizan con trazabilidad y en cumplimiento de las normativas vigentes”, explicó el Director (s) de la Aduana de Talcahuano, Francisco Méndez.
Este tipo de acciones reafirma el compromiso de la Aduana con la seguridad del comercio internacional, en particular en destinos de alto perfil como Estados Unidos, Australia y países de Europa Occidental.
Con estas operaciones, se busca mantener un alto nivel de coordinación entre las diferentes reparticiones involucradas, consolidando así un sistema de fiscalización eficiente y proactivo frente a las crecientes amenazas delictuales en la región.