El anuncio presidencial de la construcción de una nueva cárcel de alta seguridad, como una de las medidas para enfrentar la actual crisis de seguridad, generó preocupación entre alcaldes por el efecto que genera la instalación de este tipo de estructuras.
Al respecto, la alcaldesa de Peñalolén y presidenta de la Asociación Chilena de Municipalidades, Carolina Leitao, sostuvo que sería raro que un alcalde no se oponga a la construcción de una cárcel en su comuna, por todo lo que genera en un deterioro de los entornos y porque además “cuando nuestro Estado tiene que resolver un problema es muy invasivo, no ve mitigación”.
Sin desestimar la preocupación por el lugar donde se emplazará esta obra, la alcaldesa Leitao señaló en diálogo con País ADN que “más que dónde, me importa cuándo. Una cárcel en Chile no se ha demorado en construir en menos de 10 años. Entonces, si es un anuncio para resolver un problema contingente, no cumple ninguna de las expectativas, porque en la práctica, con las cárceles que tenemos hoy día, tenemos que resolver un problema y abordar un problema que está pasando hoy”.
“¿Qué está pasando con esos cabecillas de esas bandas que los están deteniendo hoy? ¿Dónde están yendo? ¿A qué cárceles están yendo? ¿Tienen celulares? ¿No tienen celulares? ¿Pueden hablar o no con sus familiares o con el resto de la banda? Etcétera, etcétera. Yo creo que esa es la conversación, porque esto tiene para varios años más respecto de una cárcel de alta seguridad”.