​Senador Juan Luis Castro lidera reunión para abordar estrategias de seguridad en centros de salud de O’Higgins

26 enero, 2025

El también médico, señaló que la violencia y el crimen organizado no pueden seguir ganando espacios donde los funcionarios trabajan para salvar la vida de los pacientes.

Con el objetivo de abordar la preocupante situación de inseguridad en los centros de salud de la región de O’Higgins, el senador Juan Luis Castro convocó a una reunión junto a la Delegada Presidencial Regional (s), Marta Pizarro; representantes de Carabineros y la Policía de Investigaciones; el director del Servicio de Salud O’Higgins, Jaime Gutiérrez; la presidenta del Colegio Médico, Sonia Correa; y representantes de los gremios Asenf, Samu-SAR, Fenpruss, Fenats y Confusam.
Durante el encuentro, se revisó la estrategia de seguridad que se está aplicando en la región para proteger a los funcionarios de agresiones en establecimientos de salud. El senador Castro enfatizó la necesidad de categorizar correctamente los niveles de riesgo en los recintos y fortalecer las acciones preventivas y reactivas ante incidentes de violencia y crimen organizado. «La seguridad de los centros de salud no puede seguir siendo un tema secundario. Los funcionarios necesitan saber que el Estado está presente y dispuesto a actuar con firmeza para protegerlos.»

“No es posible que establecimientos como el SAR Oriente de Rancagua, ubicado en un sector de alta peligrosidad, no estén categorizados en el grado extremo de riesgo que les corresponde. Esto debe cambiar, y hemos acordado avanzar en esta dirección. Además, es imprescindible que las denuncias sean realizadas de manera institucional y respaldadas jurídicamente para asegurar que las cifras sean consistentes y efectivas”, declaró el senador Castro.

El senador recalcó que las fuerzas de orden tienen que visibilizarse más. “Tiene que haber capacidad de represión respecto a los actos de manera ejemplarizadora, porque si no, vamos a terminar como en otros países: capturados, encerrados en los CESFAM y en los hospitales, siendo víctimas de las agresiones de quienes no les interesa ni la salud de la gente ni el destino de una persona, sino sólo salvaguardar un robo, un delito, una migración irregular, que es lo que ha pasado”.

La directora del SAR Oriente, Bárbara Jara, destacó la importancia de estas instancias para visibilizar la inseguridad que enfrentan los trabajadores de la salud. “Nuestro dispositivo atiende a una gran cantidad de pacientes en una zona roja con alta delincuencia. Aunque hemos implementado protocolos internos, la violencia verbal y las agresiones físicas son una preocupación constante. Trabajaremos para alinear nuestras cifras de denuncias con las de Carabineros y garantizar que los procedimientos de seguridad sean efectivos”, indicó.

Por su parte, Pamela Prieto, dirigente de la Asociación de Enfermeras y Enfermeros de O’Higgins, subrayó la necesidad de reforzar los protocolos de reacción ante agresiones y el acompañamiento judicial a los funcionarios afectados. “Llevamos años trabajando en estas mesas. Es fundamental que exista una respuesta clara y efectiva para proteger a los trabajadores de salud, quienes enfrentan agresiones verbales y físicas que muchas veces quedan impunes”, puntualizó.

Sonia Correa, presidenta del Colegio Médico de O’Higgins, hizo un llamado a la ciudadanía para promover una convivencia respetuosa en los recintos de salud. “Los recursos limitados no son culpa de los funcionarios. Es necesario que la comunidad comprenda que estamos para ayudarlos, pero que las agresiones solo deterioran el servicio y ponen en riesgo a los profesionales que trabajan bajo condiciones adversas”, expresó.

La reunión concluyó con el compromiso de todas las partes de fortalecer las medidas de seguridad en los centros de salud, incluyendo una nueva definición de estrategias en marzo y un seguimiento detallado de las denuncias realizadas. Además, se acordó trabajar de manera conjunta con el Gobierno y las fuerzas de orden para garantizar que los establecimientos de salud sean espacios seguros tanto para los funcionarios como para los usuarios.