Con más de 70 asistentes, el exsenador y expresidente del Partido Por la Democracia (PPD), Sergio Bitar, junto al director de la Biblioteca del Congreso Nacional, Diego Matte, presentaron el libro «La Constitución Inconclusa. Chile en la incertidumbre». La actividad se llevó a cabo en la sede del ex Parlamento y contó con la participación de académicos, dirigentes políticos y personalidades de distintos sectores.
El libro, editado por Bitar, recopila las experiencias de 10 candidatos al Consejo Constitucional, entre ellos figuras como Juan Sutil, Carmen Frei, Guillermo Ceroni, Jorge Insunza, Miguel Littin, Marco Antonio Núñez, Ricardo Núñez, Salvador Urrutia y Andrés Zaldívar. A través de sus páginas, la obra invita a reflexionar sobre el proceso de construcción de una nueva Constitución en Chile, destacando las lecciones aprendidas y el legado para líderes políticos actuales y futuras generaciones.
El encuentro reunió a personalidades destacadas, como la rectora de la Universidad de Chile, Rosa Devés; la decana de la Escuela de Gobierno de la Universidad Adolfo Ibáñez, María José Naudón; el alcalde electo de Providencia, Jaime Bellolio; y académicos como Leslie Sánchez (UDP), Aldo Valle (UV) y Tomás Jordán (UAH). También participó el diputado Raúl Soto, entre otros.
Durante el seminario, Sergio Bitar subrayó la importancia de un consenso político y social para avanzar en la construcción de un futuro compartido, señalando que ‘’la cuestión central de Chile es alcanzar un sentido de futuro compartido. La interrogante, en este caso, es si dejar la Constitución inconclusa y pendiente no se convierte en una barrera para construir ese futuro, ya que genera la percepción de que, tras haber perdido dos plebiscitos, estamos estancados. Lo que proponemos es romper con el pesimismo y movilizar una forma de acercar la política a la ciudadanía, y a su vez, conectar a las personas con la política, entendiendo que la diversidad es fundamental. Debe incluir tanto a la derecha como a la izquierda y debe alcanzarse un acuerdo en el que, dentro de ese marco, se desarrollen las discusiones”.
Además, enfatizó que “se requiere un diálogo intergeneracional, con respeto y valoración de la diversidad. También implica un rol mucho más activo de las universidades en la formación de los jóvenes, de manera que comprendan la importancia de debatir con generaciones mayores, capturar su conocimiento y aprender de la historia. Sin este entendimiento histórico, no es posible construir un futuro. Pero todos juntos debemos asumir la responsabilidad de crear algo nuevo. No podemos dejar este tema pendiente en su estado actual”.
La rectora de la Universidad de Chile, Rosa Devés, resaltó el valor educativo de la obra, añadiendo que “es un libro que moviliza las conciencias, algo de gran relevancia. Constituye un valioso insumo para reflexionar sobre cómo Chile debe avanzar, desde ya, hacia la construcción de una nueva constitución. Esto no implica que el proceso sea inmediato, pero es fundamental educarnos y educar a otros para enfrentar este desafío con total conciencia del valor que tiene una constitución, asegurando que el próximo intento no sea fallido”.
Por su parte, el diputado Raúl Soto destacó la necesidad de un pacto social en el contexto escenario de fricción: “Hoy vivimos en un contexto de creciente polarización política y social, con enfrentamientos culturales, ideológicos y políticos que complican aún más el panorama. Esto nos interpela a buscar caminos para el reencuentro, abrir nuevas instancias de diálogo y generar condiciones para alcanzar un pacto social”.
Finalmente, Jaime Bellolio, alcalde electo de Providencia y expositor, abordó el impacto de la desconfianza en la sociedad: “Necesitamos escucharnos y conocernos más. Mencionaba un estudio sobre polarizaciones que abordaba divisiones entre personas de izquierda y derecha, así como otras brechas relacionadas con género y generaciones. El problema radica en las conversaciones: tendemos a desconfiar de quienes no conocemos. En un mundo lleno de incertidumbre, buscamos refugios, y todo lo que percibimos como ajeno se convierte en sospechoso. No podemos permitir que esta desconfianza crezca de manera tan marcada entre jóvenes y adultos, o entre quienes participan activamente en la política y quienes no lo hacen”.
