La Dirección de Salud Municipal (DAS) de Tomé informó el caso de un paciente con el que se activó el protocolo ante sospechas del virus mpox, conocido como viruela del mono o símica. Ante esto, sus exámenes están siendo analizados por el Instituto de Salud Pública.
Ante esta preocupación de la ciudadanía, Tania Grant, médico veterinario, miembro del equipo ProSalud UCSC, y académica de la Facultad de Medicina UCSC, señaló que “esta es una enfermedad de origen zoonótico, producida por el virus mpx de la familia Poxviridie. Los principales reservorios del virus en zonas endémicas como es África Central y Occidental lo constituyen roedores como ratas, ratones y ardillas africanas, y en menor medida, los monos”.
El contacto con un paciente enfermo es la vía principal de contagio de la viruela del mono y no por aire como otras enfermedades. Grant destacó que “desde los animales ocurre por contacto directo con secreciones a través de mordeduras, rasguños o el consumo de carne. Mientras que, la transmisión entre personas se produce por contacto directo de la piel y mucosas de una persona enferma, así como también por gotitas, fluidos corporales, relaciones sexuales, lesiones corporales y ropa o superficie contaminada”.
En el caso de cuando una mujer está embarazada y sufre el contagio de la viruela del mono, podría contagiar al feto.
Síntomas
El virus penetra por pequeñas lesiones en la piel o mucosas de las personas sanas y luego de 1 a 31 días, se comienzan a presentar los síntomas. Los más frecuentes son dolor de cabeza intenso (cefalea), dolores musculares (mialgias), escalofríos, fiebre e inflamación de los ganglios linfáticos.
Maritza Muñoz, epidemióloga del Departamento de Salud Pública de la Facultad de Medicina UCSC, detalló que “a diferencia de otras enfermedades virales como el herpes o el Covid-19, lo característico de la viruela del mono es que las personas contagiadas después que tienen fiebre, suele aparecer una erupción cutánea en la cara y que se extiende a otras partes del cuerpo en forma de sarpullido en las palmas de las manos, plantas de los pies o genitales. A medida que evolucionan, se secan y se forma una costra que se caen”.
La mayoría de los casos se recuperan en 2 a 4 semanas. Sin embargo, puede haber complicaciones como sobreinfecciones bacterianas de las lesiones de la piel, neumonía, diarrea, septicemia, entre otras efectos graves que pueden ocasionar la muerte.
Es importante mencionar que no existe un tratamiento específico para esta enfermedad, pero sus síntomas pueden ser tratados a través de la vacuna contra la viruela del mono, la cual ha demostrado ser efectiva como medida preventiva.
También, reforzar medidas de higienes como lavados de manos con jabón y utilización de desinfectantes para las superficies. Para prevenir la propagación es importante informar a la población para que conozcan los síntomas y que los organismos de salud estén atentos a la aparición y detección de casos.
¿Chile está preparado?
Muñoz destacó que “desde el 2022, Chile tiene disponible la vacuna Jynneos que tiene un 99,8% de efectividad. Sin embargo, solo es para un grupo acotado de personas, entre ellas, las que han tenido contacto estrecho para una persona con viruela del mono, es trabajador/a sexual, vive con el Virus de Inmunodeficiencia (VIH), tiene o ha mantenido una infección de transmisión sexual durante el último año y/o es hombre y ha mantenido relaciones sexuales con otros hombres, sin importar la edad, orientación sexual o identidad de género”.
Otra forma de prevenir esta enfermedad es evitar viajar a África y/o tener contacto con personas que han viajado al continente, para eso es necesario el aislamiento de los enfermos hasta que sus lesiones se curen por completo y utilizar elementos de protección personal. De todas formas, si se viaja para allá, es recomendable utilizar la vacuna y evitar contacto con animales y personas que tengan ampollas en la piel.
La epidemióloga enfatizó que “el sistema sanitario se encuentra preparado para enfrentar esta situación a través de la vacuna y medidas sanitarias como alerta a viajeros para así no tener casos endógenos, e importados y evitar su propagación”.
“Este virus no tiene una tasa de contagio a nivel de Covid-19, por lo tanto, no deberíamos esperar encontrarnos con una situación de emergencia similar, y debería, por lo tanto, el sistema salud podrá absorber si es que se presentase un brote en el país. De igual manera, es una cepa nueva que está en proceso de investigación, así que hay que tener cuidado y esperar más información para saber el comportamiento que ésta puede tener”, cerró Muñoz.