*Daniel Lilayú y Marta Bravo acusaron que las agresiones psíquicas a trabajadores de centros asistenciales “ha sido persistente en el tiempo”.
A pesar de las distintas iniciativas que han buscado sancionar a aquellas personas que agreden físicamente a los trabajadores del área de la Salud, los diputados de la UDI y miembros de la comisión de Salud de la Cámara, Daniel Lilayú y Marta Bravo, señalaron que la actual legislación “no los protege por completo de las agresiones verbales y psíquicas” a las que muchas veces se ven expuestos por parte de usuarios del sistema. Por ello, ambos legisladores anunciaron este viernes el ingreso de un proyecto de ley que aumenta no sólo las penas por agresiones física, sino que también establece multas a aquellos que cometen actos de violencia verbal contra los funcionarios de la Salud.
Sin ir más lejos, Lilayú y Bravo pusieron como ejemplo a una enfermera del Hospital Base de Osorno, que debió querellarse contra un paciente por agresiones y maltratos ocurridos dentro del centro asistencial. “No podemos permitir que situaciones como las ocurridas en Osorno escalen al punto de las agresiones físicas o verbales, especialmente cuando se trata del lugar de trabajo de un funcionario de la salud, un espacio donde debieran sentirse seguros”, subrayaron.
Ambos parlamentarios explicaron que la iniciativa legal busca “aumentar las multas por maltrato corporal relevante y sancionar los actos de violencia psicológica o verbal contra trabajadores de la salud que se encontraren en el ejercicio de sus funciones o en razón, con motivo u ocasión de ellas”.
“Y por otro lado”, agregaron Lilayú y Bravo, “queremos establecer el deber de informar en un lugar visible al público en todos los recintos de salud, las penas previstas en la ley por actos de maltrato corporal o psíquico contra trabajadores de la salud que se encontraren en el ejercicio de sus funciones o en razón, con motivo u ocasión de ellas”.
“A pesar de las modificaciones más recientes, especialmente la de diciembre de 2019, la evidencia da cuenta de la necesidad de aumentar las penas establecidas en la normativa vigente, de manera de desinhibir el maltrato a dichos trabajadores durante las atenciones médicas, incluyendo las agresiones psicológicas, cuya ocurrencia es muy frecuente en tal contexto, pero que actualmente quedan en la impunidad ya que la ley no contempla la aplicación de sanciones por actos de violencia verbal cometidos por algunos pacientes o sus acompañantes, quienes, por medio de tratos denigrantes, pueden llegar a provocar situaciones notoriamente ofensivas y humillantes en perjuicio de la integridad psíquica del personal sanitario”, cerraron los diputados Lilayú y Bravo.