Un cosmecéutico -es decir un cosmético con fin terapéutico- basado en microemulsiones, para controlar la inflamación, disbiosis y recuperar la piel dañada, es el objetivo de un proyecto liderado por la académica del Instituto de Química de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), Leda Guzmán.
La investigadora se adjudicó el proyecto ANID Fondef I+D 2023 titulado “Formulación y evaluación clínica de un microemulgel con triple acción para el tratamiento de la dermatitis atópica leve a moderada”.
La iniciativa se enmarca en el concurso IDeA I+D 2023, que busca respaldar la cofinanciación de iniciativas de I+D aplicada con un sólido enfoque científico. Su objetivo es desarrollar tecnologías que tengan el potencial de evolucionar en nuevos productos, procesos o servicios, con una razonable probabilidad de generar impactos productivos, económicos y sociales significativos.
Actualmente, la dermatitis atópica es una patología inflamatoria cutánea que afecta notoriamente la calidad de vida de quienes la padecen. En este contexto, el proyecto se propone avanzar en el campo de la dermocosmética chilena, destinado a tratar enfermedades cutáneas, mediante la creación de un cosmecéutico que liberará activos de manera transdermal.
La investigación representa un avance tecnológico sustancial, ya que en Chile existe una escasa investigación en el campo de la cosmocéutica respaldada por bases científicas. La académica también considera que esta es una excelente oportunidad para el desarrollo de formulaciones innovadoras, basadas en microemulsiones con características físico-químicas que posibilitan la liberación de ingredientes activos a través de la piel, lo cual es particularmente beneficioso para activos con baja solubilidad y biodisponibilidad.
Por su parte, la académica destacó que la adjudicación de este proyecto no solo permitirá la creación de un producto diseñado y desarrollado en Chile, respaldado por una base científico-tecnológica, sino que también contribuirá a ser un pionero en la aplicación de tecnologías poco exploradas en el mercado nacional. Se espera que este desarrollo tenga un alcance internacional.
Dado el alcance versátil de su área de investigación, la académica sostuvo que su proyecto incentivará a estudiantes de Bioquímica y a alumnos de doctorado a “Explorar nuevas formas de hacer ciencia y fomentar una colaboración productiva con empresas para resolver problemas reales, contribuyendo directamente al desarrollo del país”.
OTROS PROYECTOS
La académica, también participó en la creación del Serum facial de la marca Teodora & Bees, donde uno de sus principales componentes proviene del veneno de la abeja, el cual combinado con los elementos presentes en el producto Apitop®, un bioenergético natural, que contiene jalea real, polen y propóleos, estabilizados en miel de ulmo, generan una gran capacidad antioxidante, evitando los daños a nivel de proteínas, lípidos y ADN.
Asimismo, desarrolló la formulación de un gel dental “Ayen” basado en nuevas saponinas provenientes de la corteza de Quillay (Quillaja saponaria Molina) con propiedades anticariogénicas. Estas moléculas tienen efectos sobre las bacterias causantes de caries dentales (CD) que finalmente promueven la formación de la placa dental. Además, el gel inhibe el crecimiento de hongos bucales.
Para alcanzar estos logros, resulta fundamental establecer grupos interdisciplinarios y construir equipos de trabajo sólidos, que involucren no sólo a académicos, sino también a representantes de la empresa.