En enero iniciará la segunda ronda de encuentros que se caracterizará por la sensibilización de los resultados obtenidos en el diagnóstico.
Tras recorrer Talca, Curicó, Linares y Constitución, el Liceo Claudina Urrutia de Cauquenes fue el escenario que marcó el cierre del primer ciclo de talleres del Plan Estratégico de Energía de la Región del Maule (PEER), concluyendo así una fase fundamental para el desarrollo energético de la región.
El PEER, una iniciativa liderada por el Ministerio de Energía, el Centro Tecnológico KIPUS de la Universidad de Talca y la Secretaría Regional Ministerial (Seremi) de Energía, tiene como objetivo principal contribuir al diagnóstico estratégico de la Región del Maule. Este proceso sienta las bases para orientar la formulación de la Política Energética a nivel local y nacional.
María Luisa del Campo, directora del Centro Tecnológico KIPUS y del PEER, subrayó el enriquecimiento de la fase diagnóstica gracias a la participación activa en los talleres. En enero, se tiene previsto iniciar la segunda ronda de encuentros, caracterizada por la sensibilización de los resultados obtenidos en el diagnóstico, a través de talleres provinciales y regionales.
“Hemos aprendido muchísimo de cada rincón de la región. Cada uno de los participantes nos ha entregado información muy valiosa. La idea es que sigamos avanzando en destacar la visión que nosotros tenemos como Región para el desarrollo energético regional”, expresó.
Pablo González Bravo, encargado de Participación Ciudadana del PEER Maule, elogió la disposición de las organizaciones sociales, actores públicos y privados para abordar con precisión las necesidades y desafíos energéticos reales de los territorios. Destacó la importancia de la participación metodológica, señalando los conflictos socio ambientales como elementos fundamentales en la construcción del plan.
En el taller de Cauquenes, Jessica Hernández, representante de las agrupaciones Defensores del Río Coronel Maule y No a las Torres de Alta Tensión de Cauquenes, enfatizó la necesidad de proteger el medio ambiente y abogó por una distribución equitativa de la energía. “Creo que ya no es necesario seguir ampliando los proyectos energéticos, sino enfocarnos en distribuir la energía para aquellos que la necesitan”, aseveró.
Sandra González, geóloga, resaltó la importancia de que las familias rurales se beneficien de la energía sustentable, como la termosolar. Mientras que Carmen García Salamanca, representante del Centro de Desarrollo Comunitario Crecer de Pelluhue, hizo hincapié en la necesidad de fortalecer la educación energética en todos los niveles educativos, centrándose en la diversificación de las fuentes de energía.
Marco Díaz Bravo, encargado del Programa de Gestión Ambiental de la Ilustre Municipalidad de Cauquenes, detalló los desafíos de la comuna para generar un ordenamiento en los proyectos energéticos.
“Tenemos zonas que están siendo saturadas, como el sector Población Fernández, que presenta una saturación a raíz del sistema de transmisión zonal con la construcción de una nueva subestación que se llamaría Nueva Cauquenes a menos de 200 metros de la comunidad. La proyección de distintas líneas de transmisión de alta tensión se visualizan cercanas a los domicilios de los vecinos, lo que genera un impacto significativo en su calidad de vida, en el entorno inmediato y un impacto psicosocial que no es considerado en los estudios de impacto ambiental que se presentan para su aprobación”, enfatizó.
De esta forma, la segunda ronda de encuentros, programada para enero, representa una nueva etapa en la construcción de un futuro energético sostenible para la Región del Maule. La sensibilización de los resultados obtenidos en el diagnóstico será clave para consolidar una visión compartida y estratégica en el ámbito energético.