Como partido nuestro mayor desafío es continuar con la tarea de Democratizar la Sociedad, esto quiere decir, abrazar las causas de otros, luchar por los derechos sociales, anticiparnos a los temas del futuro y buscar en la colaboración respuestas públicas a problemas nuevos y complejos que aquejan a la sociedad.
Somos leales al proyecto de cambio del presidente Boric, y queremos seguir siendo un aporte a la gestión de su gobierno desde lo que somos. El PPD es parte de una corriente socialdemócrata que fue orgullosamente protagonista de los mejores años del país, que asume con orgullo sus luces y con humildad sus sombras, que tenemos una identidad que es valiosa y que forma parte de una de las coaliciones que hoy integran el gobierno.
Por ello, honrando los recientes acuerdos de la Comisión Política y de las Directivas Regionales, es que este Consejo Nacional acuerda por un 94% de las preferencias, enfrentar la próxima elección de Consejeros Constituyentes integrando la Lista del Socialismo Democrático, como ya lo aprobara el Partido Radical, el partido Liberal y la Democracia Cristiana y con todas aquellas fuerzas y movimientos que se sientan parte de este proyecto.
El PPD seguirá trabajando para impulsar proyectos e ideas que contribuyan a la cohesion social en temas como:
• Reducir la pobreza y la desigualdad.
• Afrontar la Seguridad Humana y ciudadana
• Mejorar nuestra productividad para crecer mejor.
• Instalar una sociedad de derechos, con un Estado de Bienestar moderno y eficiente.
• Prepararnos para una sociedad más longeva.
• Promover un desarrollo territorial sostenible y descentralizado.
• Trabajar por tener una educación de vanguardia, gratuita y de calidad.
• Ser un país neutro en carbono que enfrenta el cambio climático con metas ambiciosas y que protege nuestro medioambiente.
• Impulsar la electrificación de la economia a partir del desarrollo de energias renovables no convencionales y del hidrogeno.
• Resolver las deficiencias del mercado del trabajo y enfentar la transformación digital en nuestras vidas.
Es en estos nuevos paradigmas donde instalamos nuestros desafíos de forjar nuevas alternativas al modelo de desarrollo, a la sustentabilidad, a los derechos, a la convivencia y por cierto a seguir bregando por la descentralización del poder y la equidad de género.
